La Peñota es un pico, a 1944 metros de altitud, cuya silueta rocosa es inconfundible a medida que conducimos por la Autovía A6 en dirección a los túneles de Guadarrama.
Se puede llegar a su cima desde diferentes localizaciones, siendo Cercedilla y el puerto de los Leones -o también llamado puerto de Guadarrama- sus principales puntos de ascensión.
La ruta tiene poca dificultad en ausencia de nieve, pero en época invernal es necesario llevar buen equipamiento. Tiene una pendiente acumulada de 639 metros y forma parte del Gran Recorrido GR-10.
Longitud: 13 km. Duración aproximada: 4 hora y 30 minutos.
Hay un aparcamiento y un restaurante en el mismo Alto del León, a 1511 metros de altitud, que sirve como límite territorial entre las provincias de Madrid y Segovia. Desde allí hay que cruzar la carretera con cuidado para llegar al inicio de la ruta, tras cruzar una pequeña puerta. Comenzamos la ruta por un bosque de pinos silvestres, donde también nos encontramos con los vestigios de la Guerra Civil española en forma de trincheras y búnkeres. Parte de la batalla de Guadarrama se combatió en este lugar, junto al Alto del León, donde hubo luchas feroces que se cobraron un gran número de bajas de ambos bandos. La ruta sigue por el cordal que separa Madrid de Segovia, casi en línea recta subiendo y bajando por hasta cinco collados, hasta dar con la base de La Peñota.
En la cima, a 1944 metros de altitud, hay unas vistas espléndidas de la vertiente segoviana de la sierra, el macizo de Siete Picos, así como los pueblos colindantes e incluso Madrid, si la contaminación lo permite. Su cara sur está dentro del término municipal de Los Molinos y la norte en el término segoviano de El Espinar. Se alza entre el puerto de Guadarrama, el valle de la Fuenfría y el valle del río Moros. La cima se compone de tres pequeñas cumbres de granito. En la ladera sur, a 1650 metros de altitud, y muy cerca del collado del Rey se encuentra el Pino Solitario o de San Roque, con 27 metros de altura y más de 350 años, ejemplar que podría ser el pino silvestre más grande de España.
Al ser una ruta lineal no queda más remedio que regresar por el mismo camino, momento para disfrutar de las vistas que habíamos dejado antes a nuestra espalda y que muchas veces obviamos.