Ruta a pie en la que visitaremos las construcciones más destacadas de Torrelaguna.
La longitud del itinerario es de 1,2 kilómetros y la duración aproximada es de 2 horas.
La Puerta de Montalbán, también conocida como Arco del Coso o de San Bartolomé, se sitúa en la plaza que lleva su mismo nombre. Se construyó a principios del siglo XX para anexionar el barrio de extramuros, aunque manteniendo la identidad estética de los elementos constructivos y puertas de la Muralla.
Su construcción, en el siglo XVI, se asocia al taller de Gil de Hontañón. Del edificio original sólo se conserva la fachada, de estilo renacentista, debido a que el resto fue destruido durante la Guerra Civil. Actualmente este edificio alberga la casa-cuartel de la Guardia Civil.
Palacio de estilo clasicista cuya construcción se enmarca entre los siglos XVII y XVIII. Perteneciente durante generaciones a la familia Arteaga, el Canal de Isabel II lo adquirió en una subasta pública en 1853; desde entonces, se convirtió en la Casa de la Dirección del Canal hasta que quedó en desuso en 1992. Lo más destacable de este edificio es su patio interior porticado con techos de artesonado de madera.
También conocida como casa de San Isidro, perteneció a la familia Vargas, cuyas tierras fueron trabajadas por el patrón de Madrid. De la casa de esta época no quedan restos; lo que podemos ver actualmente es una fachada renacentista, realizada en piedra y decorada con un escudo de armas.
Algunas fuentes históricas enmarcan la muralla dentro de la época medieval, ya sea de origen musulmán, o bien producto de la Reconquista. Una parte comenzó a levantarse antes de 1390, aprovechando algún tipo de sistema defensivo anterior, terminándose a principios del siglo XV. La muralla se mantuvo intacta hasta el siglo XVII, hasta que los destrozos de la Guerra de la Independencia, en el siglo XIX, iniciasen su deterioro.
Saliendo del recinto amurallado por la puerta del Berrueco, este puente cruza el arroyo Matachivos, uniendo el centro histórico con el barrio del Arrabal.
Algunas fuentes históricas enmarcan la muralla dentro de la época medieval, ya sea de origen musulmán, o bien producto de la Reconquista. Una parte comenzó a levantarse antes de 1390, aprovechando algún tipo de sistema defensivo anterior, terminándose a principios del siglo XV. La muralla se mantuvo intacta hasta el siglo XVII, hasta que los destrozos de la Guerra de la Independencia, en el siglo XIX, iniciasen su deterioro.
Se edificó entre los siglos XIV y XV como mercado de abastos. Tras la construcción del pósito y el traslado de la compra-venta de grano a la Plaza Mayor, se transformó en alfolí o almacén de sal. Recientemente se ha rehabilitado como restaurante.
Levantada en 1802 sobre el lugar en el que se hallaba al casa natal del Cardenal. Las contribuciones del Cardenal Cisneros a su villa natal fueron muy numerosas. Cabe destacar la aportación a la construcción de la iglesia parroquial, la fundación de un hospital, la conducción del agua, el convento franciscano de la Madre de Dios, y el pósito, además de obras benéficas y mecenazgos generosos.
Es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura gótica madrileña, aunque en su decoración se mezclan elemenos góticos y renacentistas. Su construcción abarca desde los primeros años del siglo XV hasta el primer cuarto del siglo XVII. Los retablos son barrocos y platerescos. Entre ellos resalta el del altar mayor, de tipo churrigueresco, atribuido a Narciso Tomé.