Este recorrido transcurre por el único tramo bien conservado de la antigua calzada romana que en tiempos del emperador Vespasiano (s. I. d.C.) unía Titulcia, al sur de la Comunidad de Madrid, con la ciudad de Segovia. Fue prácticamente el único paso utilizado entre las dos mesetas ibéricas hasta el siglo XVIII.
Como elementos de interés en esta vía encontramos, entre otros, el puente romano del Descalzo, en un sector bien conservado de la vía imperial. Tanto la calzada como los puentes han sido declarados Conjunto Histórico-Artístico. Cerca de este puente se encuentra la Fuente de la Salud en una zona en la que se pueden observar especies vegetales protegidas como los tejos y los serbales.