Entre febrero y marzo tiene lugar la floración de los más de mil quinientos almendros que se encuentran en la Quinta de los Molinos, un espectáculo floral que año tras año se convierte en un gran reclamo para los visitantes.

Situado en la calle Alcalá, 257, el parque de la Quinta de los Molinos se convierte cada año durante estas fechas en un fenómeno de la naturaleza que conviene visitar cuanto antes, ya que suele durar entre dos y tres semanas.

Este regalo para los sentidos nos recuerda que la primavera se abre paso cuando las primeras flores blancas y rosas empiezan a cubrir las ramas de los almendros que pueden visitarse a lo largo de las grandes extensiones de arbolado, en el que también podemos encontrar una gran cantidad de ejemplares como olivos, pinos o eucalipto, aunque, sin duda alguna la estrella del jardín en esta fecha son los almendros.

Los almendros se encuentran por toda la finca pero los más populares se encuentran junto a la entrada secundaria de la calle Alcalá, junto a la boca de metro de la parada Suanzes y los de la entrada oeste en la calle Miami. 

Este jardín de uso público cuyo origen es una finca de recreo rústico urbana con zonas de explotación agrícola y un marcado carácter mediterráneo, dispone además de edificios y arquitecturas declaradas de alto interés. Asimismo, el parque cuenta con el Espacio Abierto Quinta de los Molinos​, un espacio cultural pensado expresamente para público infantil y adolescente así como para sus familias.

Más información: Quinta de los Molinos 

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