CATEDRAL DE LA ALMUDENA
Consagrada en 1993 por Juan Pablo II, en honor a la patrona de la ciudad, la Virgen de la Almudena, se ha dicho de ella que es la catedral nueva más vieja del mundo. Las diferencias de color en la piedra reflejan las etapas de construcción.
La Catedral de Madrid, en honor a la patrona de Madrid, retoma el estilo gótico y adaptándolo a la estética romántica de la época en la que se inició su construcción.
La polémica ha acompañado siempre a la Catedral de la Almudena, debido principalmente a la mezcla de estilos que presenta, neoclásico en el exterior, neogótico en el interior y neorrománico en la cripta, fruto de las diversas modificaciones en sus proyectos.
El resultado final y después de que la edificación fuera dirigida por seis arquitectos diferentes y de forma intermitente durante más de cien años, poco tiene que ver con el proyecto original del Marqués de Cubas.
Su claustro se terminó de construir en 1955, y la fachada, cinco años más tarde, aunque su inauguración definitiva no se realizó hasta 1993 por el Papa Juan Pablo II.
A diferencia de otras catedrales, con una orientación este-oeste, la de la Almudena tiene una orientación norte-sur, fruto de su concepción como parte integrante del conjunto del Palacio Real de Madrid. Está construida en piedra de Novelda (Alicante) y granito de las canteras de Colmenar Viejo (Madrid).
El fundador de los Neocatecumenales, Kiko Argüello, recibió el encargo de pintar en el ábside de la Catedral una "corona mistérica", los momentos más importantes de la vida de Cristo.
Sobre las pinturas, se instalaron siete vidrieras dedicadas a la voz de Dios, con el sustantivo "palabra" traducido en diferentes lenguas: latín, griego, hebraico, siríaco, cirílico y español.
Los frescos mantienen una influencia bizantina, mientras que las vidrieras presentan un estilo puramente abstracto.
Dirección: Calle Bailén, 10. (Metro: Ópera, Líneas 2 y 5)
Más información: www.catedraldelaalmudena.es