TAPEO CON ARTE, SHOPPING Y COPA

¿Te apetece un tapeo, rodeado de arte, cultura y encanto? Te invitamos, en el centro de Madrid, a disfrutar de este plato español, tan apreciado por muchos, en las terrazas o en el interior de sus bares y restaurantes.

Te proponemos el Mercado de San Miguel, situado entre la Plaza de la Villa y la Plaza Mayor. Quizá comiences con unas ostras, acompañadas de una copa de cava. Si preferimos algo más tradicional podemos saborear también una tapa de jamón ibérico y un vermú.

Desde el Congreso de los Diputados, custodiado por dos majestuosos leones que presiden su entrada, atravesando la calle del Prado, llegarás hasta la Plaza de Santa Ana. Tómate unas tapas o un refresco en cualquiera de sus cervecerías y terrazas, y dirige después tus pasos hacia el barrio de Las Letras, donde además de ocio y comercio, encontrarás muchas tabernas con encanto y tradición como La Dolores, La Daniela, El Barril de las Letras, Estado Puro o Atlantik Corner, donde comerás a base de raciones.

En este barrio, la calle Huertas, uno de los centros de ocio nocturno de la ciudad, decenas de bares, locales y pubs abren sus puertas para ti hasta altas horas de la madrugada.

O si prefieres una copa en uno de los bares más exclusivos: el Glass Bar, situado en el Hotel Urban, muy cerquita de La Puerta del Sol

En la zona norte de Madrid, el Paseo de la Castellana, con el Estadio Santiago Bernabéu como protagonista, cuenta también con magníficos restaurantes, terrazas, tapas y pinchos.

¡Es la hora del shopping!
Nos vamos al centro a comprar unos abanicos y unos suvenires, pasando antes por la "Milla de Oro" para darnos un capricho en una exclusiva tienda, o ¿quizás eres de los que buscas diseño español a la última? Entonces no te pierdas Malasaña o Triball. ¿Te apetece un centro comercial? Acércate a Príncipe Pío, cerca del Palacio Real. ¡Aquí lo encontrarás todo!.

En la mañana de un domingo en Madrid es imprescindible una visita por El Rastro. Es recomendable llegar sobre las 9 horas para recorrer este mercadillo que se extiende por la Ribera de Curtidores y las calles colindantes desplegando ante los ojos del viandante todo tipo de mercancías.

Todo ello en el barrio de la Latina, famoso, entre otras cosas, por ser zona habitual de tapeo, del que, en torno al mediodía, podemos empezar a disfrutar. Además, cerca de La Latina merece la pena visitar los Jardines de las Vistillas, desde donde contemplar Madrid o descansar un rato tumbado en el césped.